Nací el 17 de diciembre de 1987, en la apacible y matera ciudad de Paraná, Entre Ríos, Argentina. En la actualidad, mis días transcurren en Santa Fe (la cordial). Soy el orgulloso padre de dos adorables pequeños, Luca y Emma, quienes iluminan mi vida junto a Lili, mi compañera de travesía y amor inquebrantable .

Me autodenomino un ferviente amante del estudio de la mente, las emociones, la psicología y la intrincada danza del comportamiento humano, perpetuo aprendiz en el vasto universo del conocimiento. Mi dedicación se erige en la impartición de cursos, talleres y el acompañamiento a familias, así como la participación en conferencias dirigidas a padres, educadores y la audiencia en general. Mi labor, impregnada de compromiso, se concentra en la infancia y la adolescencia, orientada hacia la educación emocional, una crianza respetuosa, el florecimiento personal y el complejo tejido del neurodesarrollo. Estos han sido los pilares desde los cuales he procurado forjar contribuciones significativas al avance de la sociedad que fervientemente anhelamos.

En mi historia académica sobresalen las distinciones de: diplomado en filosofía y psicoanálisis, diplomado en neurociencias. Especialista en coach educativo. Gestor y consultor emocional organizacional, avalado por la prestigiosa Asociación Internacional de Inteligencia Emocional. Posgrado en funcionamiento cerebral, terapias cognitivas y mindfulness. Maestría en Neuropedagogía Aplicada. Diplomado en grafopiscología forense, específicamente centrada en el maltrato y abuso infanto juvenil.

Entre las páginas de mis obras literarias, tituladas “Neurociencia de las emociones”, “Wifi emocional”, “Deja que te hable”, “50 días de Crianza Positiva”, “Padres estoicos, hijos resilientes” y “Mente volcánica”, plasmo mi compromiso con la divulgación de conocimientos esenciales para el bienestar emocional y el desarrollo saludable de las generaciones venideras.

Siempre he sostenido que para trabajar con la infancia es imperativo dirigir nuestros esfuerzos hacia los adultos que la rodean, es decir, hacia toda la sociedad que compone este tejido interconectado. Es por ello que extiendo una cordial invitación a todos y todas a sumarse a esta hermosa tribu, donde, si así lo deseamos, experimentaremos una metamorfosis colectiva para ser cada día mejores en nuestra noble tarea de acompañar y orientar a los más pequeños.

Desde este modesto rincón, nuestra hermosa y maravillosa tribu de Crianza Positiva, te invito a unirte a nuestro viaje, a transitar juntos este camino impregnado de amor y crecimiento .